Historia de Campo de Criptana


HistoriaD urante el periodo de Alfonso VI la zona se encontraba bajo la denominación de «dote de Aixa». Las luchas entre las tribus y sectas de los invasores musulmanas a lo largo del siglo VIII fue habitual en la zona. La zona fue reconquistada por caballeros de la Orden de Santiago. La reconquista hace que la población se fusione en una localidad mediante la unión de tres poblados: El Campo, Criptana y Villajos. El Campo era un poblado nacido junto al fuerte de San Cristóbal, Criptana era un poblado similar protegido por el castillo de Criptana y Villajos era la población originaria que quedaría despoblada tras la reconquista.


Existe documentación escrita en el Monasterio del Escorial que data de comienzos del siglo XVI. La villa pertenece desde los comienzos al reino de Toledo y durante este periodo figura una hermandad de treintena de hidalgos que reside en ella. Durante el reinado de Felipe III, en 1609, recibe la denominación de villa.



Bandera y Escudo

BanderaT anto el escudo como la bandera de Campo de Criptana poseen el mismo diseño partido.3 La primera parte de azur con dos menguantes de plata; y la segunda de gules, con un castillo de oro, aclarado de gules y surmontado de un lucero también de oro. El escudo se representa cargado sobre el pendón de Castilla y una cruz de Santiago. Las armas ya eran conocidas en tiempos de Felipe II.


La tradición cuenta que las dos medias lunas significan dos victorias ganadas a los musulmanes en la Reconquista; el campo azul, la protección del cielo para conseguirlas; el rojo, la sangre vertida en ellas; el castillo, el que existía en el actual santuario de la Virgen de Criptana; y la estrella, la aparición de ésta en la ermita. La existencia de tales batallas es probablemente ficticia y las medias lunas parecen ser una simple evolución de las iniciales del nombre de la población.



Himno

HimnoE l himno a Campo de Criptana fue compuesto en 1935 por José Vicente Ortiz Muro (letra) y Celedonio Cedenilla (música) y promovido por el entonces director de la Banda de Música Filarmónica Beethoven, Manuel Angulo Sepúlveda. Siendo adoptado como Himno Oficial de la Villa en 1939.